En estos tiempos, en nuestra ciudad, diversos espacios sociales y políticos intentan infructuosamente a través de diversos medios y formas convocar y movilizar a la ciudadanía en torno a demandas y problemáticas “de primer orden”, sin éxito alguno.
Del 11 al 14 de noviembre, con resultados totalmente opuesto a lo versado líneas arriba, se llevo a cabo en el auditorio Iván Elías Moreno el Seminario Taller “Desafío Ético frente a la Crisis Mundial Económica y Climática” promovido por Solydes y la Municipalidad de Villa El Salvador y secundados eficientemente por un conjunto importante de organizaciones sociales, educativas y culturales de la ciudad.- ¿Cómo se convoca aproximadamente 400 personas a un evento titulado Seminario Taller “Desafío Ético frente a la Crisis Mundial Económica y Climática”?
- ¿Cómo se mantiene durante tantos meses un equipo organizador trabajando en el diseño, difusión e implementación del evento?
- ¿Cómo se mantiene el interés de aproximadamente 400 personas durante 4 días?
A continuación algunos apuntes que intentan dar respuestas a estas interrogantes y que pueden ser de alguna utilidad para aquellos que buscamos promover una participación ciudadana activa de nuestros vecinos y vecinas en los asuntos de nuestra ciudad:
- La introspección o inspección interna desde la ética.
La introspección es la técnica por medio del cuál el sujeto tiene conocimiento de sus propios estados mentales. Para ello desarrolla una capacidad reflexiva y observación interna de sus pensamientos, sentimientos y actos.
Lo primero que puede sorprender de este evento es el título del mismo, a primera vista, una denominación pretenciosa, ostentosa, complicada, general, amplia, rebuscada, tediosa, (estos y otros calificativos le son endosables), que en realidad lo es para el ciudadano de a pie (creo que aquí hubo un riesgo, pero…el que no arriesga no gana), pero temática finalmente necesaria y urgente, que pone en el centro un tema esencial y vital: La ética.
La ética se convierte en el elemento central y transversal de trabajo de este evento, en el instrumento que permite viabilizar ese proceso de observación interna, sin caer en el terreno psicológico y del psicoanálisis, permite un repaso de las costumbres, actitudes y valores en relación a los temas que plantea el evento.
Lo importante y central del evento no ha radicado en la información valiosa (complemento que contextualiza el evento y ubica de manera informada a los participantes en los temas) que pueden haber brindado los ponentes (algunos más lúcidos y didácticos que otros) durante los cuatro días del evento, lo valioso del evento ha consistido fundamentalmente en hacer un juicio moral sobre nuestras costumbres, conductas, valores en relación al modelo de desarrollo en el que estamos inmersos y que este evento ha particularizado en la crisis económica y climática. Y es que la ética no prescribe, ordena o receta ninguna norma o conducta; no manda ni sugiere directamente qué debemos hacer. Su cometido consiste en aclarar qué es lo moral, cómo se fundamenta racionalmente una moral y cómo se ha de aplicar ésta posteriormente a los distintos ámbitos de la vida social. ¿Qué hace el evento entonces con los participantes?, los reta, los desafía prioritariamente a no mirar hacia fuera (lo cuál es valedero en la medida que no me haga evadir mis culpas y responsabilidades) si no principalmente a evaluar, a reflexionar y por que no, cuestionar desde su práctica y vivir cotidiano el hecho moral de su accionar en relación a los temas planteados en el evento… ese es el gran mérito del evento.
2. La diversidad y la pluralidad como fuerza y unidad.
El tema o temas que convoca el seminario no solo es competencia de algunos, son fenómenos o problemas globales que afectan al conjunto de la sociedad, en ese sentido el conjunto de actores, segmentos, sean estos culturales, sociales y políticos tienen el derecho y el deber de estar presente, sea en calidad de participante o en calidad de apoyo u organizador del mismo. Aquí otro componente de éxito, la amplitud real y sincera de la convocatoria, tanto en su aspecto interno como externo, en entender que la diversidad (la presencia de distintos) no es un problema, que la diferencia y el disentir con el otro no es una herejía, ni lo convierte en enemigo, por el contrario es una oportunidad, una fortaleza que reta y desafía al conjunto en la construcción de consensos reales y por ende sostenibles donde nos reconocemos todos y todas. La pluralidad es distinta a la diversidad, esta se encuentra reñida en esencia con la cantidad, si somos capaces de tener una convocatoria de la diversidad es más probable que la pluralidad en el evento sea mayor y por ende representativa. Hay una frase de Walter Lippman que otros espacios con “preocupación social” deben tener en cuenta cada vez que emprendan acciones en pro de nuestro distrito: “Donde todos piensan igual, nadie piensa mucho“.
3. El diálogo y la concertación como condiciones para la planificación del evento.
Otro elemento interesante a resaltar en este proceso son los niveles de dialogo y concertación como actitud en el proceso de planificación de este evento. El dialogo entendido como respeto al que habla con toda la libertad de proponer acciones, actividades desde su comisión al conjunto, escuchar con atención las ideas, propuestas, sugerencias de los compañeros antes de responder, reflexionar los planteamiento y propuestas que dicen los demás, analizar sus posibilidades y debilidades, admitir la opinión de los demás sin censura alguna y de ningún tipo. Es importante señalar que en este proceso de elaboración y planificación no solo se intercambia información, sino sentimientos y deseos que son (según mi punto de vista) más importante que la propia información. Canalizados a través de un ambiente de amplia libertad y respeto, la manifestación de estos sentimientos y deseos contribuyen en la generación de una interrelación más sincera y armónica al interior del equipo organizador.
La concertación se define de manera sencilla como la capacidad de tomar acuerdos de manera conjunta, esto que puede sonar simple, es complejo de lograr, pero a la larga garantiza el compromiso del conjunto (obligaciones contraídas de manera libre y voluntaria) con los acuerdos establecidos, generando una “mística” de trabajo particular, un estado de conciencia superior que se traduce en una práctica o quehacer efectivo y eficaz.
4. El conocimiento y la información en el proceso de planificación.
Una de las grandes ventajas de la diversidad es también la composición multidisciplinaria de sus integrantes que permite encontrar y aprovechar la riqueza de conocimientos e información del conjunto. Profesores, alumnos, artistas, dirigentes, promotores, etc. han brindado sus ideas, sugerencias y propuestas en la construcción y diseño del evento e incluso en muchos casos se han dado el trabajo de buscar, investigar y socializar información con el objetivo de enriquecer el programa del evento.
Es importante también resaltar el diseño, la estructura del evento que parte de lo macro-global para insertarse en lo micro-local y viceversa, con una metodología de reflexión-acción que se matiza de modo permanente con técnicas lúdicas, creativas y artísticas, con el objetivo de dinamizar, agilizar y mejorar los niveles de interacción entre los participantes.
Algunas sugerencias finales, breves y concisas:
- Existen aspectos y detalles (resultados, roles, funciones, responsabilidades, etc.) que son propias de la organización y que serán motivo de evaluación, con el objetivo de extraer aprendizajes que permitan enriquecer acciones posteriores.
- Del mismo modo existen aportes, sugerencias y conclusiones del evento que se han esgrimido y que son importantes ordenar, sistematizar y socializar por diversos medios.
- También es importante pensar y repensar en formas creativas que permitan seguir interactuando con los participantes motivados del evento de manera periódica, donde se puedan evaluar y hacer seguimiento a las conclusiones, propuestas, etc., que se han desprendido del seminario.
- Es clave mantener y profundizar las virtudes del evento en estas tareas posteriores, que el inmediatismo, la improvisación y el oportunismo de ninguna índole se sobrepongan a una mirada diversa, plural, planificadora, sostenida, dialogante y concertadora de hacer las cosas.
Regidor
Municipalidad de Villa El Salvador
